A sus "escasos 51 años" de vida, el piloto antioqueño Ricardo Reyes sigue dando de qué hablar. En esta oportunidad, gracias a su sensacional temporada en el TC Junior, categoría en la que ha sido dos veces subcampeón y en la que ahora suma a su palmarés, el tercer lugar de la presente temporada, dando la batalla hasta el último metro del último giro.

Reyes, a bordo de un también infatigable Mazda 323 del equipo Dynamics Racing, preparado por J&C Motorsport y con el respaldo de Ker, Galvitex y Monster Energy Drink, fue un hueso muy duro de roer a lo largo del año. Dos victorias, un segundo lugar y una pole, fueron sus argumentos de ataque en la primera parte del año. Luego del chase remató con una cifra impresionante de 6 Top 5 de 8 posibles, lo que le permitió ser opción al título y fuerte, hasta que se agitó la última bandera a cuadros de la temporada.

 

Si bien las estadísticas son muy importantes para Reyes, el piloto dejó claro esta vez que hay algo que tiene un inmenso valor, tal vez, más grande que el de las mismas cifras. Al término de la temporada dijo� "Más allá del puesto final de la temporada, que es muy bueno, me reconforta y alegra mucho, ver que a mis 51 años, doy la pelea a unos sardinos demasiado rápidos y técnicos. Para mi es muy gratificante saber que a mi edad, lucho codo a codo con un Niko Fondrini, Juan Pablo Pedraza, Marco Andrés Vargas entre otros, que son pelados que tienen experiencia internacional y muchísima calidad".